domingo, 20 de octubre de 2013

Vacío

Mis manos se han quedado quietas
la casa está solitaria
no recorren ya por sus paredes
sombras, destellos de ojos vigilantes
aturden los sonidos de campanas
rozando los cristales
me estremezco al contacto de las sombras
que se dibujan en el polvo
que levantan al alejarse
silenciosamente
para quedar una vez más
mi casa vacía.

1 comentario:

Ramiro Rodríguez dijo...

Buen texto, aunque melancólico. Saludos.